Técnicamente puedes respirar... Sin respirar realmente. Investigadores del Hospital Infantil de Boston, liderados por el cardiólogo John Kheir, MD, han pionero un enfoque innovador para eludir el requisito biológico fundamental de respirar al entregar oxígeno directamente en el torrente sanguíneo a través de micropartículas inyectables. En un estudio histórico de 2012 publicado en Science Translational Medicine, el equipo introdujo una suspensión espumosa de micropartículas lipídicas: pequeñas burbujas de gas oxígeno encerradas en una flexible envoltura lipídica que imita las membranas celulares. Estas partículas de 2 a 4 micrómetros transportan de 3 a 4 veces más oxígeno que la sangre normal y navegan de manera segura por los capilares sin causar bloqueos ni embolias. Tras la inyección intravenosa, el oxígeno se difunde rápidamente desde las partículas de alta concentración hacia la sangre y los tejidos desoxigenados, imitando el intercambio de gases en los pulmones pero sin requerir inhalación. En pruebas con animales, conejos con vías respiratorias completamente bloqueadas recuperaron niveles de oxígeno en sangre casi normales en segundos y sobrevivieron hasta 15 minutos sin respirar. Un avance en 2016 introdujo micropartículas huecas de polímero (PHMs): cápsulas de polímero biodegradables de paredes delgadas y nanoporosas que contienen hasta cinco veces más oxígeno que los glóbulos rojos, mientras requieren volúmenes de inyección más pequeños y ofrecen mayor estabilidad. Estos sistemas actúan como puentes temporales (15-30 minutos), proporcionando tiempo crítico para intervenciones como la intubación o ECMO en casos de obstrucción de las vías respiratorias, falla pulmonar severa o trauma. Las limitaciones incluyen la posible sobrecarga de fluidos por uso prolongado, impidiendo que reemplacen completamente la respiración. Si bien no es un medio para vivir sin pulmones, los refinamientos en curso—incluyendo microburbujas que se disuelven rápidamente probadas en los últimos años—podrían revolucionar la medicina de emergencia, la atención en el campo de batalla e incluso escenarios extraterrestres o submarinos al convertir minutos fatales de privación de oxígeno en momentos sobrevivibles. ["¿Micropartículas que te permiten 'vivir sin respirar'? Bueno, más o menos." FQTQ, 2025]