Las acciones tecnológicas caen hoy porque el rendimiento japonés a 30 años sube bruscamente. Lo que más importa no es el rendimiento absoluto, sino la diferencia entre los rendimientos de los bonos de EE. UU. y Japón. Si el rendimiento japonés sigue subiendo y/o el rendimiento estadounidense cae y el ARB desaparece, habrá una venta masiva.