Es bueno para la vida matrimonial / familiar hacer pequeñas rutinas. Mi esposo y yo comemos panqueques (u otro desayuno "elegante") todos los sábados por la mañana y se ha convertido en uno de los momentos más acogedores de mi semana. Saco las bonitas tazas de té y preparo una taza de té. Caliento el almíbar y los platos. Creo que todos necesitamos un poco más de esto: si las únicas rutinas son aquellas cosas que *debemos* hacer, como llegar al trabajo a tiempo, puede parecer un trabajo pesado.