Mientras los banqueros centrales se reúnen en Jackson Hole, es importante recordar que la independencia de la Reserva Federal es uno de los pilares clave del poder estadounidense durante los últimos 100 años. Sin él, Estados Unidos tal como lo conocemos no existiría, o no podría existir. Destruir la legitimidad de la Fed destruye la legitimidad de los mercados estadounidenses. Sin mercados estadounidenses hay menos inversión, menos innovación, menos crecimiento y menos prosperidad. Para nosotros y para el mundo. La credibilidad es poder.