1. Cambia completamente tu entorno. Nueva flora, arquitectura, costumbres, etc. Las diferencias hacen que la percepción se expanda. 2. Haz algo que realmente no quieras hacer. Te lo prometo, estar incómodo y aburrido hace que el tiempo se mueva como un caracol. 3. Conéctate con tus sentimientos. El tiempo nunca pasa rápido cuando estás llorando.