Trump utilizó su primer veto para bloquear un proyecto de ley que traería agua potable limpia a Colorado, un proyecto patrocinado por Lauren Boebert y aprobado por unanimidad tanto en la Cámara como en el Senado, aparentemente en represalia por el apoyo de Boebert a la publicación de los archivos Epstein y por la negativa de Colorado a liberar a un delincuente condenado actualmente en prisión estatal por manipulación electoral.